Les confieso que, primero, tuve la tentación de editar una entrada, de escarnio, dedicada al piloto Lewis Hamilton. Luego, pensé que sería más divertido teclear algo sobre su papá Anthony. Afortunadamente, he resistido la tentación (no siempre lo consigo, para muestra, un botón) y gracias a ello, ahora, tienen ante sus ojos esta maravillosa fotografía.
El autor es China Hamilton, un paisano del poco afortunado deportista que, a la vista está, resulta, infinítamente, más interesante. Y no digo nada, ya, de la modelo que posó para la imagen.
Naturalmente, hubiera ignorado la existencia de este estupendo artista de la fotografía erótica, de no haber estado buscando, por la red, imágenes morbosas del derrotado conductor de Formula Uno. Así que, en cierto modo, debo estarle agradecido.
Pero, fuera como fuese, acabé navegando (y con sumo placer, recalco) por su página web, donde me pude enterar, de que es un artista de cierto prestigio, y con varios álbumes (quizá no sea el término más apropiado) publicados. Sus imágenes, aunque de sutil inspiración sadomasoquista, son de exquisito buen gusto.
Si desean ahondar en el conocimiento de su trabajo:
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