El tamaño no importa ¿o... tal vez sí?

¿Reconocen este pájaro? Apuesto que sí. Es el inconfundible Airbus A380, o lo que es lo mismo, el avión de pasajeros más grande del mundo. Todavía no ha realizado su primer vuelo comercial, aunque sí muchos de prueba. Se espera que, tras considerables retrasos, Airbus entregue a Singapore Airlines el primer ejemplar el próximo octubre.

Todo en este avión es de proporciones faraónicas: dimensiones, carga de pago que puede levantar, distancia que puede recorrer, potencia de sus motores... Si los antiguos egipcios construyesen aviones probablemente no se conformarían con algo menos.

Por supuesto, cada cliente tiene la potestad de definir la configuración que desea para la cabina de pasajeros (número de asientos en cada clase). Airbus ha considerado una configuración estándar de de 525 pasajeros distribuidos en varias clases, aunque el avión podría acomodar a más de 800 en configuración de una sola clase. Sin embargo, independientemente del número de pasajeros, sólo se necesitan dos pilotos para manejar el avioncito (asistidos, eso sí, por redundantes y sofisticadas computadoras de vuelo).

Deseamos que este coloso del aire no tenga que vérselas con ningún contratiempo de consideración, pero por si las moscas, Airbus ha realizado un simulacro de evacuación en la oscuridad de un hangar de los locales de producción de la empresa, en Hamburgo. Un total de 873 personas (veinte miembros de la tripulación y 853 voluntarios) participaron en esta prueba, indispensable para la homologación del A380. Los participantes tenían que abandonar el aparato en menos de 90 segundos a través de unos toboganes de 15 metros de longitud, bajo la atenta mirada de 30 expertos y de 40 cámaras infrarrojas.

¿Quieren conocer el resultado? Pues no se pierdan este interesante vídeo y descubrirán cuántos segundos fueron precisos para vaciar de pasajeros este juguetito.